El Dr. Diego Wertheimer, Médico Especialista Jerarquizado en Oftalmología y presidente de la Sociedad de Oftalmología de MdP (MP 94644) nos explica que desde que nacemos hasta los 8 años de edad aproximadamente, es el período plástico del ojo, nuestros ojos están aprendiendo a ver. Cuando los ojos no son estimulados de forma correcta durante este período de la vida, se genera el proceso conocido como AMBLIOPÍA. Es lo que en la jerga lo llaman ‘‘ojo vago o perezoso’’.
CAUSAS
Las causas son varias, la más frecuente es el estrabismo, ya que al haber una desviación el cerebro comienza suprimiendo la imagen del ojo desviado y luego la anula generando la ambliopía.
Otras causas son: anisometropía (diferencia alta de graduación entre un ojo y otro), cataratas congénitas, retinoblastoma, toxoplasmosis congénita, etc.
¿CÓMO PODEMOS DETECTAR LA AMBLIOPÍA?
Generalmente los padres notan que su hijo desvía alguno de sus ojos, no fija bien la vista o la maestra refiere que el niño tiene falta de atención en clase. Es muy importante consultar de manera temprana con el oftalmólogo, quien realizará un examen completo de la vista. Se aconseja un control al nacimiento, otro a los seis meses y posteriormente uno por año.
Esta condición afecta de 2 a 3 de cada 100 niños sanos y en la mayor parte de los casos se trata con muy buenos resultados.
¿CÓMO SE PUEDE TRATAR?
El uso de gafas muchas veces es suficiente para corregir la ambliopía. Algunas veces es necesario colocar un parche sobre el ojo sano para obligar al otro a que trabaje.
‘‘Un niño que no aprende a ver en sus primeros años, es un niño que nunca desarrollará su visión potencial’’.